Es horrible cuando alguien más te recuerda no solo tus errores, sino que se mofa de ellos, como si esa misma persona fuese perfecta y jamas se hubiera equivocado; pero entrando a ello es mucho peor cuando son tus familiares los que te torturan.
Cuando era pequeña, mi familia era así conmigo. Si hacía cualquier cosa que terminara avergonzándome en público, ellos me lo recordaban a cada rato y se lo contaban a todos, como el gran acontecimiento del año; mi hermana mayor era experta en ello. No solo contaba mis vergüenzas, también las de mi otra hermana y además, hasta las "actuaba" delante de los demás, causando risas descontroladas.
En serio que era horrible y me dolía, porque me avergonzaba más... Pero jamás contó nada de sus propios errores o vergüenzas, se enfocaba en que los demás vieran las de otros y las contaba una y otra vez de ser necesario, hasta que toda la familia las sabía.
Hace unos años, hice un viaje con mi familia.
Mi hermana mayor tiene un hijo, creo que ahora mismo tiene 10 u 11, ya no sé, no recuerdo fechas, pero posiblemente en ese entonces tenía unos 7 u 8.
Mi hermana mayor, empezó a hacerse la chistosa, como siempre, a contar lo que su hijo había hecho en la escuela, burlándose de cosas que le pasaban.
Mi familia reía y yo solo la miré con seriedad, mientras miraba a mi sobrino que la sujetaba y le decía: Ya mamá, no cuentes eso, ¡no me gusta!
Pero mi hermana seguía y seguía, elevando la voz, actuando la situación y causando mas "gracia".
Entonces la interrumpí y le dije: Creo que ya entendí como es la cosa cuando creces y me alegra tener un sobrino que cargue con todas esas vergüenzas que antes me hacías pasar a mi; me alegra ver que descargas tus frustraciones y haces sentir mal a tu hijo en vez de a mi, felicidades! Creo que he comprendido el ciclo de la vida, mientras creces, le haces la vida infeliz a tus hermanas, contando aquello que las avergüenza, para practicar lo suficiente y ser mucho peor al tener hijos, avergonzandolos sin importarte como se sienten.
Mi hermana me miró molesta y mi madre, como siempre, solo la defendió y me dijo: hay que sangrona eres, solo son chistes.
Si, quizá, solo son chistes, pero no entienden que esos chistes pueden generar complejos. Es cierto que hay que reírse de lo que te ocurre en la vida, pero en tu propia vida, no en la de los demás y mucho menos vas a ir contársela a otros frente a la persona que le ocurrió, avergonzandola en el proceso. Uno solo puede superar esos momentos cuando ya está grande y cuando se da cuenta que no fue nada importante, pero si alguien más se lo recuerda y se burla, entonces, esa sensación vergonzosa sigue y sigue y sigue, sin que uno la pueda superar adecuadamente y como mi sobrino intentaba, solo queda tratar de ocultar y negarlas.
Pero esto lo hacen más que nada, personas que no saben sobrellevar sus propias vergüenzas. Intentan a toda costa hacer quedar mal a los que tienen cerca, solo para asegurarse que se rían de otros y las pendejadas que han cometido, porque ellos no quieren sentir esa misma sensación que provocan, porque no son lo suficientemente valientes para enfrentar sus propias situaciones desagradables y ni siquiera quieren recordarlas.
Y no me digan que no es cierto, porque en toda mi vida, jamas vi que mi hermana dijera o repitiera alguna situación que realmente haya sido vergonzosa para ella; al contrario, solo cuenta sus logros con orgullo, donde salió todo bien o donde fue la mejor. Ella no quiere enfrentarse a sus propios errores, ni siquiera quiere volver a vivirlos o recordarlos e intenta desviar la atención hacia otras personas.
Pero está bien, así hay muchos y supongo que solo me quedaré al lado de las personas de quienes se han reído, guardaré silencio y soportaré que se burlen de mi, al fin que se, que con esos errores de los cuales otros se burlan o critican, yo si he madurado, porque ya puedo enfrentarlos y volver a escucharlos sin que me afecte, como a ellos posiblemente les vaya a afectar, si una personas como yo, decide hablar.