¡Increíble! ¿cierto? ¿Eh? Pues para mí sí que lo es y antes de hablarles de esto, primero contaré un poco de mi situación, pueden saltárselo, dejaré unos asteriscos donde inicia eso y donde termina, para que no tengan que leerlo todo XD además, si no les interesa, vayan a dónde está la imagen XD ahi está lo que es realmente importante
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Realmente he pasado por unos días difíciles, no solo personalmente (que ya ando mucho mejor, pero sigo teniendo dudas y no quiero meterme en problemas, por eso no saben de mi) ya me siento más tranquila, aunque mi estado anímico sigue un poco alterado y lo que más me preocupa es que en unos días entraré a esos días ‘difíciles’ para las mujeres; la depresión se está yendo poco a poco y creo que puedo retomar mi ‘rutina’ en poco tiempo, pero, debo tomar las cosas con calma… El sr. Osito me ha apoyado y el pobre ha sufrido mucho mi mal carácter, mi mal genio y mi estado completamente inestable; de hecho discutimos y me dijo “solo quieres estar enojada, ¿verdad?...” No es que quiera estar enojada, realmente no quiero, pero no sé qué sucede; como dije, sé que estoy mal, posiblemente necesite volver a terapia, pero el problema no es mi relación, es mi propia manera de ver las cosas…
Ya estoy tratando de superar esto, pero lamentablemente, no es todo del sr. Osito o de mí, como pareja…
Me enteré de algunas situaciones familiares que también me bajaron el ánimo y la moral, sigo preocupada y realmente, no sé qué es lo que me preocupa más, si la posible separación de mi hermana o el estado emocional de mi sobrinito… Realmente, no quiero ahondar en el tema, pero tampoco puedo dejarlo de lado, menos ahora que mi madre está enterada de todo y despotrica de la situación conmigo cada que me habla por teléfono (supongo que no tiene con quién más desahogarse) pero pues, obviamente eso me afecta…
Mi familia cree que no soy muy suceptible, que no soy voluble, porque ante ellos mantuve una máscara… Es en serio, toda mi vida fue así, especialmente desde la situación con el hospital psiquiátrico.
Mi padre quería que fuera fuerte, que nada me afectara, que no llorara, que hiciera las cosas siempre bien y especialmente que fueran perfectas, porque debía rendirle cuentas a él, aunque en el fondo, no le interesaba lo que yo sentía… A la fecha, dice que me quiere, pero una cosa es lo que se dice y otra lo que se demuestra.
Mi madre, ella cree que era feliz estando allá, con los pleitos y gritos constantes, con su manera de intentar meterse en todo lo que yo estaba viviendo, pero, eran cosas que no quería contarle, porque realmente, ¡no le tengo confianza! Cómo tenerle confianza a una mujer que me miente y cree que siempre tiene la razón, además de que se cree con derecho de tratar de manipular mi actitud, mis decisiones e incluso, mis sentimientos… Sé que no lo hace conscientemente, pero ella siempre quiso que fuera exactamente como ella quería y no puedo, ¡no quiero! Yo no soy así y no hay manera de decírselo, porque se enoja.
Mi hermana mayor, no sé qué le pasó, siempre he dicho que desde que se casó se murió por dentro… Ella era diferente, ella era más amable, más dulce, más independiente… Ahora, es una persona completamente distinta, que le gusta ser el centro de atención, que no sabe guardar un secreto y obviamente tampoco le puedo tener confianza.
Por eso, nunca les contaba mis problemas, por eso, prefería decírselos a mi psicóloga… Por eso me refugié en otras cosas, mis dibujos, mis escritos, mis cosas… El problema es que nada de lo que tenía era privado ¬¬ menos con mi madre esculcando mis cosas.
Cuando me casé con el sr. Osito, él, poco a poco fue quitando mis máscaras; me sentía como una cebollita llena de capas y capas de falsa seguridad, de falso control, de falsa estabilidad, de falsa felicidad… Poco a poco, él fue descubriendo todos mis problemas, esos que solo le conté a mi psicóloga, y hasta la fecha, por eso es con el único que no me controlo, porque llevé toda una vida fingiendo ser ‘normal’, tener control y siempre me afecto.
Todos y cada uno de mis problemas físicos, especialmente cada crisis asmática, era porque tenía problemas personales y escolares, porque mis padres se peleaban, porque me di cuenta de la manera en que me relegaron cuando el engendro (mi sobrino mayor) nació…
Mi esposo dice que lo odio, pero ellos hicieron que yo me sintiera desplazada.
Mi padre vio en él al hijo que yo no podía ser, porque yo no era varón mi madre le permitía y permite aún, hacer cosas que a mí me prohibía y se justifica solo porque ’él es un niño’ y mi hermana mayor, no sé qué le pasa, pero desde que ese niño llegó, dejó toda su vida en manos de mis padres, aceptando que le digan que hacer, soportando una situación familiar bastante deplorable (como toda la vida ha sido mi familia) y metiéndose en constantes conflictos con ellos, pero sin poder tomar una decisión propia.
Por eso, no puedo ser sincera con mi familia, por eso, prefiero mantener distancia de por medio y a pesar de eso, siempre me quieren meter en sus broncas… Y cuando eso pasa, ¡me irrito!
Realmente quiero a mi segunda hermana, es mi amiga y la única a la que le digo mis secretos y ella igual, pero como se lo dije a mi madre y a ella misma, “es su decisión, yo no puedo meterme en sus asuntos, yo solo puedo apoyarla”, y por mucho que mi madre diga ‘dile algo’ no lo voy a hacer, pero eso no quita que mi madre siga presionando y use el chantaje emocional con respecto a mi sobrinito “pobrecito, él se da cuenta, blah, blah…”
No soy apegada a cosas, y pocas veces me apego a las personas, pero esto no quiere decir que no quiera o no tenga sentimientos, simplemente que soy de esas personas que quiere mucho, puede desaparecer una temporada, volver y todo como si nada, mi cariño no va a cambiar, a menos que me hagan algo (como conseguir enfurecer a Ojou cat por tratarme de una manera desagradable) o lastimen a los que quiero (mi esposo o mis hijos).
Yo prefiero lidiar con mis demonios a solas, quizá no es lo correcto, pero así lo he hecho toda mi vida y no puedo cambiarlo; eso es algo que mi esposo tampoco entiende y por eso, muchos pleitos son por lo mismo. Cuando discutimos, él insiste en saber qué tengo y presiona tanto que me hace enfurecer.; a veces siento que en esos momentos me asfixia de tanto que me pregunta, insiste, presiona…
¡Maldita sea! Quiero estar sola, necesito estar sola, necesito que pase y necesito pensar, que se me baje el coraje y con suerte olvidar, después de todo, mi mente es un maldito laberinto lleno de caos y fantasía que, en algún momento, va a absorber esos recuerdos de lo que me hizo sentir mal, en algún momento voy a dejarlo de lado para pensar en otra cosa y lo olvidaré, para estar como si nada, para simplemente llegar, abrazarlo, acurrucarme con él, dormir y ser feliz, como normalmente…
Pero el sr. Osito no lo entiende y ahí está la manera en que nuestras broncas se hacen más grandes, tanto que llega a ser una explosión de mi parte y llego a acabar con su paciencia. Muchas veces él se siente culpable, pero no es así, yo sé que es mi culpa, porque hasta yo misma me doy cuenta cuando me calmo, que me aprovecho de su actitud tan pacífica en cuanto a pleitos; él siempre cede y a veces, por estar yo enojada, no me doy cuenta de que la que debería ceder soy yo, porque es mi culpa.
Pero ahí entra otro problema que tengo, que me enseñó mi ‘querido’ padre y también me lo hecho en cara muchas veces; soy orgullosa para aceptar mis errores, y, aunque quiera remediar eso, me es difícil, por eso intento redimirme de otras maneras.
Normalmente, el sr Osito y yo no discutimos más que por tonterías que no tienen importancia, pero cuando hay un agente externo, entonces, las cosas se ponen malas (como en esta ocasión, que estallé por algo insignificante, pero realmente, es por todo lo que ocurre).
Amo a mi esposo y sé que él me ama a mí (y que no quede duda de eso, porque si no lo hiciera, no me soportaría), pero no somos iguales… Él siente más necesidad de compartir sus problemas y yo, de dejar que se me olviden, a solas…
Solo necesito una buena taza de café, mis audífonos, música metalera (romántica no o me pondré a llorar) y una actividad para pensar en otra cosa que no sea eso que me hizo enojar (un buen libro, un buen manga, escribir, dibujar… ¡lo que sea!) porque en el fondo, quiero seguir practicando esa filosofía que me mantuvo de pie siempre “por más fuerte que sea la tormenta, siempre saldrá el sol…”
Y quiero que salga, quiero que todo vuelva a la normalidad, esa dónde duermo hasta tarde, dónde no hago nada, donde espero al sr. Osito en la noche, para cenar juntos, nos contamos nuestro día en la mesa, compartimos ideas de proyectos que, posiblemente no vean la luz porque somos ambos unos malditos postergadores, pero el simple hecho de soñar, nos hace felices; luego, hacer cariños vervales a nuestros hijos, alimentarlos y decirles que son ‘feos’, pero así los amamos…
Ir a la habitación hacer cosas juntos o por separado, pero saber que, aunque no hagamos lo mismo, nos apoyamos mutuamente… Dormir abrazados, escuchar sus ronquidos, despertar y platicarnos los sueños y, en sus días de descanso, discutir por la comida que a él le toca preparar o la película que iremos a ver al cine antes de las 5 pm, porque si salgo después de esa hora “me hago piedra” (es un chiste personal)…
Quiero días tranquilos, donde me queje porque tengo un cochinero en la casa y el sr. Osito me diga ‘no te preocupes’ y con eso me dé alas para seguir sin limpiar…
Quiero paz y tranquilidad, esa que siempre tengo si no me meten en broncas, si no me hablan para decir que ocurrió algo malo… Aprovecharme de estar lejos para no involucrarme en cosas que realmente no quiero de mi familia, porque a la larga, eso me va a afectar. No es que no los quiera, son mi familia, pero realmente, me siento mejor con esta familia que he formado al lado de mi esposo; el sr. Osito, yo, Loki, Choncho, Yume y Triz, es todo lo que necesito y, así como yo no le hablo a mi madre para decirle cosas que yo misma puedo arreglar y solo le hablo para saludar o cuando tengo algo bueno y aceptable para sus estándares que contar, por eso, quisiera que fuera de esa manera conmigo…
Pero cada cabeza es un mundo, ¿cierto?
Aunque no lo crean, lo que más me preocupa es que mi madre venga a visitarme… Porque sé que va a criticar todo (así es ella) y, auqnue yo soy feliz con lo poquito que tenemos aquí, ella no lo será y menos, ahora con los pleitos de mi hermana, porque ella cree que el sr. Osito me maltrata y yo no le quiero decir… Y sacarle esa idea de la cabeza va a ser muy difícil, pero si ve que no tengo ‘suficiente’ ropa o no tengo la casa ‘aceptable’ a su parecer, lo va a ‘corroborar’ en su mentecita… Eso señoras y señores, es lo que más me preocupa, porque sé lo cruel (y metiche) que puede ser mi madre a veces y no quiero que haga sentir mal a mi esposo, que hace todo lo que puede por mantenerme…
En fin, ahí está un poco de lo que por ahora me tiene inquieta y aun falta mucho más, pero mejor no me alargo XD ajajajaja
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Así pues, espero que disfruten la historia, aunque no tenga lemon XD no sé por qué, pero realmente, estos relatos oscuros no me salen con lemon O..ó
Título: Abracadabra
Link: http://ojousama.weebly.com/abracadabra.html
Resumen. Siendo niño, Daniel sufrió una situación traumática, pero realmente no fue como todos lo imaginaron; desde ese momento, ganó un amigo y protector, ahora que ha crecido, aún falta conocer más de este ser.
Espero que disfruten la lectura y que la compartan si lo desean, yo aún trabajo en lo de Keroh y en otras cosas que debo, pero lamentablemente, tendré que postergar un poco, porque me pidieron realizar un plano y, aunque no me haga mucha ilusión la idea y ni siquiera reciba algo de remuneración por eso, pues, no puedo negarme (ya saben, familia XD)
Nos leemos y lamento todo lo que escribí sin sentido XD ajajaja