Chibi Historia 030 – San Valentin 2024 •Nyrn y Skoll•
Esta chibihistoria, pertenece a un grupo que fue publicada para conmemorar San Valentín 2024.
Era una mañana fría, cuando Skoll estaba haciendo una oración en el altar de las piedras sagradas, con las manos cerca de su pecho y manteniéndose hincado con la espalda recta; al terminar hizo una gran reverencia y luego se puso de pie.
—¿A que se debe ese rezo? —Nyrn llegó con paso tranquilo.
El albino se giró y miró a su esposo con ilusión.
—¿De verdad lo preguntas? —sonrió—. Creí que siempre sabías lo que pedía.
—Sé lo que pediste, mi hermosa flor —el rubio se acercó y le besó los labios—, pero no entiendo el por qué lo haces hoy y especialmente, por qué tuviste que venir hasta aquí —sentenció curioso.
Aun había cosas que Nyrn no entendía, de las tradiciones que tenían los humanos y debido a que era el primer año, después de que Skoll hubiese salido de su árbol, con su primera semilla en el pecho, sus conocimientos aun no se ampliaban lo suficiente.
Le había dicho a Skoll que no era necesario que fuera a las piedras sagradas a orar, pues con solo pedirle las cosas, él las cumpliría sin titubear, pero Skoll iba algunos días al templo y hacía oraciones, especialmente en luna llena, solo por tradición.
Skoll sujetó las manos de su pareja— hoy es una fecha especial —dijo con solemnidad—, según la tadición, este día se debe rezar para que todas las parejas enamoradas, alcancen la felicidad y debe hacerse, antes de que los peregrinos lleguen a hacer sus propias peticiones de amor —explicó.
—No habías rezado por eso antes —el rubio ladeó el rostro, no recordaba que Skoll hubiese hecho esa oración en antaño, ni siquiera el año anterior, cuando habían iniciado su relación.
—¿Cómo iba a pedir por el amor de pareja, si yo mismo no lo conocía con exactitud? —sonrió triste—. Lo que sabía de las parejas, era solo lo que miraba de mis padres y no era una buena referencia.
—Ya veo… Creo que lo entiendo —asintió el mayor—. Y ¿por qué en esta fecha precisamente? —indagó.
—No lo sé —Skoll negó—. Sólo sé que es una tradición, pero en ningún libro dice la razón del por qué en esta fecha… —se alzó de hombros—. Lo más antiguo que se menciona es que, el primer sumo sacerdote, realizo una ceremonia en esta fecha por primera vez, orando para que las parejas enamoradas tuvieran una vida llena de felicidad, pero no se sabe el motivo —suspiró—. Desde entonces, el Sumo Sacerdote debe orar en la mañana y realizar otra plegaria al caer el sol, cuando los peregrinos dejen sus coronas florales cómo ofrenda.
—Así que, lo hizo mi padre…
Nyrn caminó hasta el cuenco del centro y creó una flor con una gota de su sangre.
—¿Sabías que hoy era el cumpleaños de mi madre? —mencionó con suavidad y se giró a ver a su esposo.
Skoll se sorprendió— no, no lo sabía.
Nyrn volvió sus pasos y acarició una mejilla blanca.
—Siempre me causó curiosidad que cada año, en esta fecha, los anteriores Sumos Sacerdotes hicieran este rezo y pidieran lo mismo, al igual que todos los peregrinos que traían sus coronas de flores —ladeó el rostro—, porque para mí, era solo el día en que mi madre había salido de su árbol de vida o lo que tú llamas, cumpleaños —sonrió—. Pero al igual que tú, no entendía a lo que se referían con esas plegarias, pidiendo amor verdadero y felicidad en sus matrimonios —confesó—, pero ahora lo sé.
—¿Lo sabes? —Skoll ahondó más la caricia.
—¡Por supuesto, mi hermosa flor! —sentenció el rubio—. Porque estoy enamorado de ti, es que yo también deseo felicidad para nosotros dos y para aquellos que se sientan de la misma manera que nosotros —dijo con convicción.
El albino sonrió ilusionado y abrazó al mayor— me alegra que hayas descubierto conmigo, lo que es estar enamorado —levantó el rostro—, pero eso significa que nunca antes cumpliste esas plegarias, ¿verdad?
Nyrn entornó los ojos— no sabía cómo responderlas, así que… no.
—Bien, entonces, este año, tienes que empezar a tomar en serio tu trabajo —Skoll lo señaló con el índice.
—Sí, este año empezaré a cumplir esas plegarias, mi hermosa flor —sujetó las manos del menor y besó el dorso de cada una— y te aseguro que me esforzaré, especialmente para hacerte feliz por el resto de tu vida.
El albino sonrió ilusionado; Nyrn no tenía que esforzarse más, pues con el simple hecho de quedarse a su lado, era más que suficiente, pero le parecía muy dulce que el otro se esforzara tanto por ese amor que ambos se tenían.
—¿A que se debe ese rezo? —Nyrn llegó con paso tranquilo.
El albino se giró y miró a su esposo con ilusión.
—¿De verdad lo preguntas? —sonrió—. Creí que siempre sabías lo que pedía.
—Sé lo que pediste, mi hermosa flor —el rubio se acercó y le besó los labios—, pero no entiendo el por qué lo haces hoy y especialmente, por qué tuviste que venir hasta aquí —sentenció curioso.
Aun había cosas que Nyrn no entendía, de las tradiciones que tenían los humanos y debido a que era el primer año, después de que Skoll hubiese salido de su árbol, con su primera semilla en el pecho, sus conocimientos aun no se ampliaban lo suficiente.
Le había dicho a Skoll que no era necesario que fuera a las piedras sagradas a orar, pues con solo pedirle las cosas, él las cumpliría sin titubear, pero Skoll iba algunos días al templo y hacía oraciones, especialmente en luna llena, solo por tradición.
Skoll sujetó las manos de su pareja— hoy es una fecha especial —dijo con solemnidad—, según la tadición, este día se debe rezar para que todas las parejas enamoradas, alcancen la felicidad y debe hacerse, antes de que los peregrinos lleguen a hacer sus propias peticiones de amor —explicó.
—No habías rezado por eso antes —el rubio ladeó el rostro, no recordaba que Skoll hubiese hecho esa oración en antaño, ni siquiera el año anterior, cuando habían iniciado su relación.
—¿Cómo iba a pedir por el amor de pareja, si yo mismo no lo conocía con exactitud? —sonrió triste—. Lo que sabía de las parejas, era solo lo que miraba de mis padres y no era una buena referencia.
—Ya veo… Creo que lo entiendo —asintió el mayor—. Y ¿por qué en esta fecha precisamente? —indagó.
—No lo sé —Skoll negó—. Sólo sé que es una tradición, pero en ningún libro dice la razón del por qué en esta fecha… —se alzó de hombros—. Lo más antiguo que se menciona es que, el primer sumo sacerdote, realizo una ceremonia en esta fecha por primera vez, orando para que las parejas enamoradas tuvieran una vida llena de felicidad, pero no se sabe el motivo —suspiró—. Desde entonces, el Sumo Sacerdote debe orar en la mañana y realizar otra plegaria al caer el sol, cuando los peregrinos dejen sus coronas florales cómo ofrenda.
—Así que, lo hizo mi padre…
Nyrn caminó hasta el cuenco del centro y creó una flor con una gota de su sangre.
—¿Sabías que hoy era el cumpleaños de mi madre? —mencionó con suavidad y se giró a ver a su esposo.
Skoll se sorprendió— no, no lo sabía.
Nyrn volvió sus pasos y acarició una mejilla blanca.
—Siempre me causó curiosidad que cada año, en esta fecha, los anteriores Sumos Sacerdotes hicieran este rezo y pidieran lo mismo, al igual que todos los peregrinos que traían sus coronas de flores —ladeó el rostro—, porque para mí, era solo el día en que mi madre había salido de su árbol de vida o lo que tú llamas, cumpleaños —sonrió—. Pero al igual que tú, no entendía a lo que se referían con esas plegarias, pidiendo amor verdadero y felicidad en sus matrimonios —confesó—, pero ahora lo sé.
—¿Lo sabes? —Skoll ahondó más la caricia.
—¡Por supuesto, mi hermosa flor! —sentenció el rubio—. Porque estoy enamorado de ti, es que yo también deseo felicidad para nosotros dos y para aquellos que se sientan de la misma manera que nosotros —dijo con convicción.
El albino sonrió ilusionado y abrazó al mayor— me alegra que hayas descubierto conmigo, lo que es estar enamorado —levantó el rostro—, pero eso significa que nunca antes cumpliste esas plegarias, ¿verdad?
Nyrn entornó los ojos— no sabía cómo responderlas, así que… no.
—Bien, entonces, este año, tienes que empezar a tomar en serio tu trabajo —Skoll lo señaló con el índice.
—Sí, este año empezaré a cumplir esas plegarias, mi hermosa flor —sujetó las manos del menor y besó el dorso de cada una— y te aseguro que me esforzaré, especialmente para hacerte feliz por el resto de tu vida.
El albino sonrió ilusionado; Nyrn no tenía que esforzarse más, pues con el simple hecho de quedarse a su lado, era más que suficiente, pero le parecía muy dulce que el otro se esforzara tanto por ese amor que ambos se tenían.
Esta fue difícil, ya que, en el universo de Natural, no existe 'San Valentín', así que me tuve que inventar algo XD Para ellos sería más utilizado 'Dia del amor', pero nada más. Cómo se darán cuenta, esto es antes de que tengan a Neyr, es decir, con respecto a temporalidad, se ubicaría entre el final de Natural y su propio epílogo.
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